Un ambiente rural, familiar y próximo es lo que vais a encontrar en nuestro restaurante que, en las tierras de Vilallonga del Camp, os espera. Nuestra "masia", construida por nuestros padres hace 50 años, os recibirá con las puertas abiertas y os conducirá a la tradición de la cocina catalana de raíz, aquella que, en los inicios de La Montoliva, ya relucía en las primeras "calçotadas" y "montolivadas" que se realizaron dentro de sus paredes, que, ahora, están cubiertas por las herramientas ancestrales, auténticas, que nuestra familia utilizaba para cultivar las tierras de La Montoliva.

Cocina tradicional, basada en productos de la tierra como los caracoles, los "calçots" o el "xató". Cocina de sabor, auténtica, la de siempre, construida a partir de recetas familiares que se han mantenido hasta nuestros días, conservando, así, la esencia de la cocina de toda la vida. En La Montoliva los productos son de proximidad y de productores locales; conviene destacar los huevos (recogidos de nuestras gallinas) y las hortalizas (cultivadas en nuestro huerto), que hacen el viaje de pocos metros del campo al plato.

La Montoliva es un viaje a los gustos ancestrales, a los platos típicos de nuestra madres y abuelas, a los sabores que nos han visto crecer y con los que nos hemos hecho mayores. La cocina casera catalana trasladada a nuestros días pero sin perder la esencia más pura. 

"Calçotades", caracoladas, bacalao "a la llauna", carne a la brasa, pan con tomate, embutidos, carne de caza, postres caseros... todo esto y mucho más te espera en nuestra carta, en nuestros menús y en las propuestas gastronómicas que puedes encontrar siempre en nuestra casa. 

La Montoliva es un lugar ideal para celebraciones multitudinarias, grupos de amigos, familias con niños, así como también para todo tipo de festejos (comuniones, bodas, comidas familiares, cenas y comidas de empresa...), tanto por su amplio comedor interior como por la posibilidad de utilizar los espacios exteriores, las terrazas, la zona de animales o el parque infantil. 

Un comedor amplio, con diferentes salas, con diferentes accesos para permitir libertad y amplitud a todas aquellas personas y grupos que nos visitan. Un interior plenamente rural, donde la madera, las herramientas de cultivar la tierra, los productos secos... forman nuestro día a día, decorando las paredes de la antigua "masia" de nuestra familia, dando calidez al ambiente y creando un marco perfecto y majestuoso para una propuesta gastronómica de raíz y tradición catalana. La Montoliva te hará soñar y te transportará a un ambiente rural y ancestral, donde el tiempo no corría como ahora y la cocina se hacía sin prisa, con mimo y cariño.

La Montoliva se encuentra situada en un entorno rural tranquilo donde pasear y gozar de la naturaleza es posible. En la finca del restaurante disponemos de un amplio parking donde, de forma gratuita, los comensales pueden dejar los coches. El parking puede acoger, también, autobuses, para aquellos grupos que lo necesiten. El espacio exterior se complementa con una zona con animales (faisanes, gallinas, patos...) zona que es la preferida por los más pequeños de la casa. Para ellos, también, disponemos de un jardín frontal con columpios y toboganes.