La Montoliva es el nombre que recibía, hace años, la finca en la que, actualmente, se encuentra nuestro restaurante. Cultivada por nuestros padres, amantes y trabajadores del campo, como lo han sido miles de payeses catalanes que han edificado nuestro país, fueron ellos los que, hace 50 años, construyeron la masia que nos acoge. En esta tierra los avellaneros tenían un peso predominante que, aún ahora, se puede descubrir con tan sólo un paseo por la zona; y, en honor a todos aquellos hombres y mujeres que hicieron grande nuestro pueblo, le mantenemos el nombre: La Montoliva.